Vistas de página en total

miércoles, 7 de abril de 2021

Frágiles como vidrio. Sin sentido e Insensibilidad



Hace dos años en una fabrica de Sabadell una joven de 18 años fue violada por turnos por cuatro individuos que se sientan en el banquillo pero aquel día había más. La Audiencia de Barcelona juzga desde ayer a los presuntos culpables de esta violación. La víctima que se meó encima según sus propias palabras, tuvo que enfrentar ante el tribunal un tremendo interrogatorio que se ha reproducido, en parte, en los distintos medios de comunicación. Yo lo escuché en RNE. Preguntas sobre si no pudo llamar a un timbre o gritar, si los atacantes usaron preservativo o no, si eyacularon o no, si está segura de que lo que cuenta ocurrió tal como lo cuenta... Hasta que harto del camino que tomaba todo, el juez llamó la atención a los que interrogaban, ministerio fiscal y abogada defensora, diciéndoles que podía gustarles o no la versión de la víctima pero que dejaran de escarbar. Escarbar, cómo si no fuera bastante la violación de tu cuerpo y de tu alma, porque cuando te violan, también te roban parte de tu alma. Algunos medios de comunicación hablan de falta de empatía y otros directamente de revictimización cosa muy frecuente en estos casos “golpea a la víctima que ya está bastante vapuleada para ver si se derrumba definitivamente”. Todos conocemos el juicio público que se hizo por ejemplo a la víctima de la Manada de Pamplona a la que pusieron un detective para ver qué tipo de vida llevaba. Me llama la atención, a la luz de lo leído y escuchado en prensa, presente en el juicio, el papel del fiscal y de los abogados defensores de los acusados, que han mostrado, cómo mínimo, poco tacto y ausencia total de perspectiva de género. Espero que la abogada defensora, a la que yo escuché, se llevara un nudo en el estómago para casa y la revoltura le durase varios días. Las mujeres deberíamos negarnos a defender a acusados de delitos sexuales, es una opinión personal como abogada de formación que soy que no de profesión. La joven sufrió la violación por turnos de tres individuos que la asaltaron de madrugada a la salida de un bar en Sabadell y la agredieron en una nave industrial a la que la trasladaron por la fuerza, según su testimonio. El cuarto, miraba sin hacer nada para impedir la agresión. La Fiscalía pide para los cuatro acusados, de origen marroquí (aunque esto sólo sea un dato), 37 años de prisión y la expulsión del país. La actuación del fiscal en la sesión de ayer ha sido muy criticada, obligando a la joven a rememorar una y otra vez las escenas de la violación, ahondando en la parte más dura del relato y forzándola a retroceder y volver a explicar los detalles de la agresión cuando ya los había contado, sin embargo parece que al presentar las conclusiones ha dado a la víctima el crédito que parecía empeñado en negarle. Las asociaciones judiciales han reiterado a la luz de estos comportamientos de compañeros del mundo de la justicia la necesidad de formación en perspectiva de género pues el proceso además de doloroso, en muchas ocasiones, supone una revictimacion de la víctima. Y luego todavía van algunos y niegan la necesidad de un movimiento feminista fuerte y reivindicativo: “la mujer miente por naturaleza” o “algo haría” o “la mujer provoca” son solo algunas de las ideas que están tan enquistadas en la sociedad patriarcal que contaminan también a quienes imparten justicia o participan en el juego de repartirla. Pero sí hubo algo que me revolvió esta mañana es que no me puedo imaginar la escena, no me cabe en la cabeza la reconstrucción del suceso, “hombres” que en grupo se excitan hasta violar cuatro veces a una chiquilla, de qué estamos hablando? Hasta las bestias tienen otro sentido del sexo (si esto puede llamarse sexo). Ayer también en RNE, 18 individuos toquetean a una cría en un parque de Madrid y vuelvo a pensar en animales pero no en los que rodean a su presa para poder comer... es este mundo el que queremos? Y pienso a la luz de algunos comentarios que leo a propósito de otros sucesos que también atentan contra los demás (sin ánimo de comparar) “vive y deja vivir” joder, anda que si fueran lo tuyos los que sufrieran la violencia (que sea) también dirías eso o es que te falta “una garcilladina pal kilo”? Al sistema que nos ampara imperfecto como todo, hay que respetarlo tanto cuando imparte justicia como cuando impone prohibiciones o protege derechos. Nos guste, más o menos, la fórmula. A ver si reflexionamos un poco y vamos poniendo en la balanza lo que somos como sociedad (a la deriva) y lo que queremos ser. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario